El papa Francisco ha aprovechado la audiencia general de este miércoles en el Vaticano para reconocer de nuevo los errores en la evangelización. “¡Cuántos errores se han realizado en la historia de la evangelización queriendo imponer un solo modelo cultural!”, ha dicho el Papa en el aula Pablo VI, lamentando que así se ha privado a la Iglesia de la “riqueza de muchas expresiones locales que llevan consigo la tradición cultural de enteras poblaciones”.
Francisco ha recordado que a veces este intento del cristianismo de imponer un propio modelo de vida ha llevado a la violencia y a las guerras, y ha advertido en su catequesis que “esto es exactamente lo contrario de la libertad cristiana”.
Sus palabras llegan después de la gran polvareda que generó en España una carta dirigida a México reconociendo los “pecados personales y sociales” cometidos por la Iglesia católica durante la evangelización, pese a que ni era la primera vez que Francisco los admitía ni tampoco es el primer pontífice en hacerlo.
En julio de 2015, en su viaje a Bolivia, ya pidió “humildemente perdón” no sólo por “las ofensas de la propia Iglesia, sino por los crímenes contra los pueblos originarios durante la llamada conquista de América”. En Bolivia recordó que lo reconocieron también sus antecesores citando a Juan Pablo II, quien reclamó “que la Iglesia se postre ante Dios e implore perdón por los pecados pasados y presentes de sus hijos”.
“En la llamada a la libertad descubrimos el verdadero sentido de la inculturación del Evangelio: ser capaces de anunciar la buena noticia de Cristo salvador respetando lo que de bueno y verdadero existe en las culturas”, ha sostenido el Papa en la audiencia de hoy.
