Por Oscar Valenzuela
No existían condiciones externas, ni internas favorables para el éxito de una empresa guerrillera encabezada por Caamaño en 1973.
La UniónSoviética cambió brusca y sorpresivamente su política exterior de apoyo a los grupos insurreccionales de la Extrema Izquierda Revolucionaria latinoamericanos, forzado por la grave recesión económica que la afectó a finales de la década de los 60’s y principios de la década de los año 70’s por los enormes gastos incurridos en la expansión imperialista, la costosa carrera espacial y la competencia por la supremacía nuclear con los Estados Unidos.
La Unión Soviética se vió forzada a firmar acuerdos sectetos de libre comercio con los Estados Unidos para recuperar su deteriirada y maltrecha economía, que permitieron el ingreso al mercado soviético de capitales frescos, de las principales firmas y marcas registradas norteamericanas como Coca Cola, Marlboro, etc., las cadenas de comidas ràpidas como McDonald y Burguer King; del City Bank y otras instituciones financieras de capital estadounidense..
Firmaron acuerdos en la ONU sobre el control de la proliferación de armas nucleares; realizar investigaciones conjuntas de carácter científicas en el campo espacial y un pacto de no agresión para bajar las tensiones de «la Guera Fria» evitando el peligro de una Tercera Guerra Mundial.
La Unión Sovietica suspendió las ayudas a los grupos y movimientos de liberación nacional y redujo los subsidios y facilidades a los paises bajo su órbita.
Ese cambio brusco e inesperado en la politica exterior soviética forzó también al gobierno cubano a colocar en un segundo plano al proyecto guerrillero de Caamaño que quedó varado en Cuba..
El gobierno de Castro no queria entrar en contradicción con sus aliados estrategicos en la geopolítica internacional y principales socios comerciales, la Union Soviética; ni quería exponerse a un conflicto y escàndalo internacional por una agresión de la Expedición de Caamaño contra la República Dominicana desde territorio cubano.
El Proyecto Guerrillero de Caamaño habia perdido importancia estratégica para los intereses del gobierno cubano
Sigue en la próxima entrega.
