El ex gobernador del Banco Central José Lois Malkún estimó como “un disparate”, la propuesta del candidato presidencial del PLD, Abel Martínez de que eliminaría el Anticipo en caso de ganar las elecciones.
Malkún explicó que si la evasión del Impuestos Sobre la Renta ronda el 45 por ciento con todo el anticipo, en el caso que se elimine, se elevaría la misma, por encima del 60 por ciento y afectaría las finanzas del Estado.
El también ex ministro de Finanzas explicó que introducir cambios en el sistema tributario tendría que ser parte de una reforma integral, que incluya la eliminación de excepciones fiscales, eliminar algunos impuestos y subir otros.
En declaraciones al programa La Hora 22 en Teleradioamérica dijo, “No puedes plantear la eliminación del anticipo sin proponer al mismo tiempo una reforma fiscal, eso es parte de un paquete, porque en el país la evasión es muy alta.
Profesionales que no cotizan
Hay cientos de profesionales independientes que no pagan impuestos, quienes más pagan son los empleados públicos y de las empresas”, explicó
Asimismo, el economista y político estimó que el país tendrá que abordar el tema de los impuestos en forma integral, que además de una reforma fiscal debe incluir otros puntos importantes como revisar algunos impuestos y reducir el gasto fiscal, que son las exenciones que benefician a distintos sectores.
Sobre las exenciones
Malkún explicó que todas esas exenciones juntas suman más del RD$250,000 millones, que significa un 4.5% del Producto Bruto Interno, que bien podrían ir al fondo público para construir obras de bien social a favor de toda la nación.
Señaló que esas exenciones benefician al turismo, la industria del cine, algunas empresas que están en la frontera, de la salud, energía, transporte y hasta del propio ITBIS.
El economista y político explicó que para impulsar el desarrollo nacional no basta con introducir una reforma fiscal integral, porque habría que complementarla con una calidad en el gasto, respeto a la institucionalidad, transparencia, independencia y que los recursos no se vayan en campaña política.
Añadió que además habría que superar esa cultura de dilapidación de los recursos, corrupción, dispendio, porque el robo se constituyó en una institución protegida por la misma justicia y el ministerio público.
