-Ramón Vargas
Los días 11 y 12 del presente mes se realizó la Cumbre de la OTAN en Vilna, capital de Lituania. Hasta para los promotores y soportes del conflicto que mantiene Kiev y toda la estructura de guerra de la OTAN contra Rusia, resultó inexplicable el comportamiento de Zelensky, a quien proporcionan todo lo que pide, que llegara amenazando y chantajeando, de una manera tan grosera y descarada, a los presentes en la mencionada Cumbre. Hasta el representante de Inglaterra, Ben Wallace, reconocido como uno de los más anti‐Putin, lo llamó mal agradecido diciendo: «debe calmarse y agradecer toda la ayuda que le suministramos».
El comediante (que parece que todavía no logra hacer la transición de cuando se ganaba la vida haciendo comedia a presidente de un país), de manera increíble, al llegar a la Cumbre de la OTAN, dijo que estaba molesto porque no lo invitaban y que necesitaba un compromiso con garantía y que estuviera firmado para entrar en la OTAN.
Dicen varios medios que esa persona actúa bajo los efectos de las drogas; su comportamiento da lugar a esos comentarios. Mientras está en el lugar, se queja que no lo invitan, y por si fuera poco, presiona para que los europeos firmen un acta de defunción colectiva…
Todo eso es culpa de aquellos que en su confrontación con Rusia, han creado un monstruo que pide, pide, y pide; y mientras más armas le dan, más sigue pidiendo…
Por eso, el mismo Wallace le dijo: «Oye, no somos Amazon para darte todas las armas que pides». Ese cómico presidente no tiene un comportamiento normal, parece un niño haciendo berrinche pidiendo juguetes… Da la impresión que se cree más importante que la misma OTAN.
Ahora bien, esa desesperación solo tiene su explicación en el fracaso de la publicitada contraofensiva, para la cual Occidente hizo una descomunal inversión proporcionando todo tipo de armas y hasta ahora resultando en un tremendo fracaso. A casi dos meses de iniciada, no han podido llegar a la primer línea defensiva del ejército ruso, que no ha sentido ni el disparo de un revolver. No han pasado de la llamada «zona gris» de amortiguamiento.
Lo que resulta increíble es que ante la evidencia de ese fracaso y la imposibilidad de vencer a Rusia, no busquen una solución negociada para evitar que más personas mueran. Los Estados Unidos ante ese fracaso acaban de anunciar, aún con la oposición de sus aliados, el suministro a Kiev de bombas de racimo.
Eso es una locura; han mandado de todo para cambiar el curso del conflicto y nada resulta. La pregunta es: ¿y si Rusia también las usa?
Con la ventaja aérea y de artillería que tiene Moscú, esa decisión solo aumentará los muertos en suelo ucraniano, ya que tanto unos como otros, la detonarán en la tierra de Ucrania… una auténtica locura y desprecio por la vida de su pueblo por parte del desquiciado Zelensky.
El conflicto Rusia‐OTAN, está en un punto crítico y peligroso, la Alianza no tiene forma de ganarlo en la guerra convencional, está con Zelensky como la canción aquella: «ni contigo ni sin ti».
Luego de la Cumbre de Vilna, donde fue a presionar y recibió par de nalgadas, solo consiguió la promesa de entrar en la OTAN» cuando las condiciones lo permitan o cuando gane la guerra», es decir, NUNCA.
