El imputado en el caso Medusa, César Nicolás Rizik Pimentel, admitió los hechos que se le acusaron por el Ministerio Público y se declaró culpable de estafar al Estado con más de 130 millones de pesos a cambio de su participación en beneficio de sus empresas.
Pimentel expresó que está arrepentido y dispuesto a colaborar con el órgano acusador para resarcir cualquier daño ocasionado, además, detalló que utilizaron sus empresas y amigos, para unirse a las demás empresas que participaron en dicha licitación desde el año 2016 hasta el 2020.
Asimismo, el imputado añadió que le propusieron trabajar en el proceso y preparación de la licitación a través de un allegado de Miguel Estrada Jackson y Rolando Rafael Sebelén Torre para ser parte de los suplidores de alimentos de los centros penitenciarios.
Según el Ministerio Público, las empresas de los acusados, ganaron esta licitación utilizando la falsedad de contenido como el uso de firma y documentos falsos como maniobra fraudulenta para estafar al Estado Dominicano e indicó que mediante el uso de firma y documentos falsos.
A través de la Distribuidora Ropi SRL y la colaboración del señor José Alberto Abbott Brugal como “presta nombre”, obtuvieron dos contratos para los alimentos de las cárceles, por los que la Procuraduría General de la República pagó la suma de RD$131,019,966.84.
Por este caso se implica al exprocurador Rodríguez de liderar una red en la que el MP elaboró un expediente de 12, 274 páginas y contiene más de 3,500 pruebas e involucra a 41 personas físicas, 22 empresas, aproximadamente 400 testigos y se les imputa de defraudar el erario público con 6 mil millones de pesos.
