El expresidente Hipólito Mejía se marchó este martes de la funeraria Jardín Memorial, donde son velados los restos de su esposa Rosa Gómez de Mejía donde permaneció por cerca de cinco horas.
“Yo quisiera ver a todo el mundo y darle un abrazo, pero es bastante difícil, son 80 y pico de años, yo soy un señor mayor”, fueron algunas de las palabras del exmandatario.
A su salida, el exmandatario expresó que tenía alrededor de cinco horas en la funeraria y “es muy duro”.
La exprimera dama falleció la noche del lunes producto de un infarto. Sus restos serán sepultados este miércoles.
