El dirigente peledeísta Domingo Contreras estimó como preocupante que un segmento de la sociedad esté buscando dinero prestado para comprar la comida diaria, porque se trata de un tema que hace años el país había superado.
De acuerdo al candidato a alcalde del Partido de la Liberación Dominicana en el Distrito Nacional la angustia de no poder comprar los alimentos por los altos precios, se entendía que era una situación ya superada, y ha reaparecido con una intensidad que empobrece a la población.
“Cuál es el problema?, para ellos las cosas están bien, están buenas, porque ellos proyectan la situación de la población nacional desde su posición empresarial, y no de la realidad que está viviendo la gente”, expresó.
Añadió que tres años atrás cuando ingresaba a cualquiera de los barrios de las distintas comunidades del país, se encontraba con arena, block, cementos, varillas y otros utensilios de la construcción, porque la gente tenía interés en aprovechar la buena situación para remodelar y renovar sus viviendas, pero hoy lo que se observa es un renacimiento de las compraventas.
“Llegando tan lejos, que gente en sus viviendas han debido eliminar una de las tres comidas que hace tres años se comía, y ahora hasta tiene que tomar prestado para poder comprar la comida diaria”, explicó el también miembro del Comité Político del partido morado.
Refirió que un amigo que reside en el sector de San Carlos le contó cómo sus hijos hicieron una celebración porque les anunció que ese día comerían carne, una situación que ni siquiera la clase media baja la entendería.
“Aquí hay gente pasando hambre, la palabra hambre ha vuelto a estar en la preocupación del dominicano, a ese deterioro hay que añadirle espectáculo como el permitido en la Zona Colonial, que dicho sea de paso, evidenció que el Ayuntamiento del Distrito Nacional se ha autoexcluido de su responsabilidad”, significó el aspirante a la alcaldía de la Capital.
Contreras dijo que la canasta básica para una familia de cuatro personas ronda los RD$40,000 mensuales, cuando el nivel de ingreso en un hogar donde trabajan dos, no supera esa suma en salarios.
