Científicos de varias naciones que han tomados hielo en Groenlandia en el 1995 y el 2011, se encontraron con un alarmante repunte de las temperaturas.
Observaron que desde 1995 hay un brusco aumento de las temperaturas en Groenlandia, que evidencia que la gigantesca isla septentrional es 2,7 grados (1,5 grados Celsius) más cálida que la media del siglo XX, la más cálida en más de 1.000 años.
Los núcleos de hielo de Groenlandia -una visión de las temperaturas a largo plazo anterior a los termómetros- no habían mostrado una señal clara de calentamiento global en la parte norte-central más remota de la isla, al menos en comparación con el resto del mundo.
Pero los testigos de hielo tampoco se habían actualizado desde 1995. Los núcleos recién analizados, perforados en 2011, mostraron un drástico aumento de la temperatura en los 15 años anteriores, según un estudio publicado en la revista Nature.
“Seguimos observando un aumento de las temperaturas entre la década de 1990 y 2011”, afirma Maria Hoerhold, autora principal del estudio y glacióloga del Instituto Alfred Wegener de Alemania. “Ahora tenemos una firma clara del calentamiento global”.
Analizar los datos de los núcleos de hielo lleva años. Hoerhold tiene nuevos núcleos de 2019, pero aún no ha terminado de estudiarlos. Ella espera que el aumento de la temperatura continúe, ya que la capa de hielo y los glaciares de Groenlandia se han derretido más rápido recientemente.
“Se trata de un hallazgo importante que corrobora la sospecha de que el ‘calentamiento ausente’ en los testigos de hielo se debe a que los testigos terminan antes de que se produzca el fuerte calentamiento”, dijo el científico del clima Martin Stendel, del Instituto Meteorológico Danés, que no participó en la investigación.
