El encargado de Negocios de la Embajada de los Estados Unidos en el país, visitó al presidente de la Suprema Corte de Justicia, Luis Henry Molina Peña en momentos en que se están cayendo la mayoría de los expedientes de corrupción que cursan en los tribunales.
Aunque las partes coincidieron en señalar que el motivo del encuentro tuvo como objetivo, el fortalecimiento de relaciones y la colaboración conjunta; se da como un hecho que la representación de la legación diplomática haya expresado su preocupación por el debilitamiento en la persecución de la corrupción.
Robert Thomas valoró la estabilidad de la democracia dominicana, y reconoció que esta se ha convertido en un modelo en la región.
El funcionario estadounidense destacó que, en esos avances, el Poder Judicial ha jugado un rol fundamental.
No obstante, una fuente vinculada al Ministerio Público confió que la Embajada de Estados Unidos ha mostrado su preocupación por “el derrumbre” en pocos meses de los casos de corrupción que se ventilan en los tribunales, y en los cuales, técnicos estadounidenses han estado asesorando.
En las últimas semanas, como por arte de magia la justicia ha dispuesto la excarcelación de los imputados en los notables casos Antipulpo, Coral, Coral 5G, Medusa, Operación 13 y otros.
El ministerio Público ha criticado en forma vehemente la festinación de esos casos de corrupción, incluso trascendió que la acusación en el caso del ex ministro de Haciendo Donald Guerrero, fue archivado en un importante despacho.
Ante esta situación, se ha mostrado resistencia a ponerlo en acción, y han cuestionado en público las diligencias que en este sentido ha impulsado la procuradora encargada de Persecución, Jenny Berenice Reynoso.
