Isidro Toro Pampols
En un país cualquiera un partido político que obtenga el 10% en la boleta para elegir diputados, podría aspirar obtener el 10% de los escaños de la Cámara, pero hay seudo leyes electorales que impiden que un congreso sea una fotografía del electorado al momento de la elección.
Una de esa es el llamado método D’Hondt o el sistema que coadyuva, con otras disposiciones, para que los partidos medianos y pequeños obtengan menos curules de lo proyectado.
En República Dominicana se implementó su aplicación mediante la Resolución 11-2015 para la asignación de escaños en los niveles congresual y municipal en las elecciones del 15 de mayo del 2016, estableciendo en su artículo segundo que “se aplicará la representación proporcional en la determinación de los cargos que correspondan a cada partido, adjudicando aisladamente dichos cargos al partido o alianza de partidos cuyo factor de elección para esa posición sea el más elevado.”
La precitada técnica se utiliza para asignar escaños en sistemas de representación proporcional por listas electorales, incluso con voto preferencial. Recibe ese nombre en reconocimiento al jurista y matemático belga Víctor D’Hondt (1840-1901), que fue el primero en proponerlo.
Este mecanismo favorece a los partidos mayoritarios, al punto que en Chile se denuncia que beneficia a las grandes agrupaciones o alianzas, en contra de los minoritarios.
En base al método de D`Hondt la mecánica para calcular la cantidad de diputados o regidores que pueda obtener un partido en nuestro país es la siguiente:
Primero, se ordenan de mayor a menor, en una columna, las cifras de votos obtenidos por las candidaturas y segundo, se divide el número de votos obtenidos por cada lista por 1, 2, 3, etcétera (número naturales), hasta un número igual al de escaños correspondientes a la demarcación.
Las curules se adjudican a las candidaturas que obtengan los cocientes mayores en el cuadro, atendiendo a un orden decreciente.
La Resolución antes citada establece el mecanismo en su artículo cuarto: “Disponer que la cuantificación de escaños obtenidos por cada partido se hará mediante el factor de elección de cada partido o alianza de partidos, calculado en base al Método D’Hondt.
Este factor de elección, mientras no le haya sido adjudicado ningún cargo a cada partido, será el número total de votos por él obtenido; la mitad de dicho número desde que le haya sido adjudicado un (1) cargo; la tercera parte de su votación total, cuando tenga adjudicados dos (2) cargos; la cuarta parte después de que le hayan sido adjudicados tres (3) cargos; la quinta parte cuando le hayan sido adjudicados cuatro (4) cargos, y así sucesivamente hasta que todos los cargos hayan sido adjudicados.”
Supongamos que en una demarcación se sufragaron 200.000 votos válidos en la cual se elegirán 5 diputados entre 6 agrupaciones políticas.
Los resultados son: organización «A» 80.000 votos; organización «B» 60.000 votos; organización «C» 40.000 votos; organización «D» 10.000 votos; organización «E» 9.000 votos y organización «F» 1,000 votos
Se divide la cantidad de votos obtenidos por cada agrupación, primero entre 1, luego entre 2, a seguidas entre 3 y así, sucesivamente, hasta dividirlo entre 5 que es la cantidad de escaños en disputa. Por ello, los 80,000 votos de la organización «A» fueron divididos, en la primera columna, entre 1; luego esos 80,000 divididos entre 2 (40,000); posteriormente, esos mismos 80,000, fueron divididos entre 3 (26,666); luego entre cuatro (20,000) y, finalmente, entre 5 (16,000).
Lo propio se hizo con las demás agrupaciones. Como son 5 escaños, se elegirán los primeros 5 que obtengan los cocientes mayores en un orden decreciente.
La Cámara de Diputados de Republica Dominicana se compone de 190 escaños (2020).
178 son electos en demarcaciones territoriales en proporción de 1 por cada 50,000 habitantes en cada provincia, teniendo cada una un mínimo de dos diputados.
Así que un partido que obtenga 300,000 votos distribuidos proporcionalmente en cada provincia o Distrito Nacional solamente tendrá opción sobre algunos de los cinco (5) electos a nivel nacional para representar a los partidos políticos minoritarios que no hayan alcanzado una curul.
La provincia de Santo Domingo está representada por 43 diputados, redistribuidos en seis (6) circunscripciones, por lo que un partido que obtenga el 10% de apoyo electoral podría soñar con lograr alrededor de 4 escaños.
Pero no es así, ya que su 10% de apoyo electoral es diluido en seis demarcaciones reduciéndose a menos del 2% en cada una, lo que licua su apoyo electoral y el método de D`Hondt no le facilita alcanzar algún asiento lo que sólo sería posible si logra concentrar ese 10% en la división que arroja más diputados.
El método D’Hondt se utiliza en los sistemas electorales de muchos países y tiene variantes las que se les conocen con otros nombres.
Algunas de estas permiten a los partidos minoritarios tener mayor oportunidad de lograr asientos o en otros casos se le colocan barreras difíciles de franquear.
Lo cierto es que la aplicación de un sistema para conformar la representación proporcional en el congreso de un país puede cambiar la correlación de fuerzas a lo interior del parlamento.
Como ejemplo tenemos el debate que se ha abierto en España, donde los partidos medianos y pequeños aspiran sancionar un sistema que les permita obtener mayor representación con la misma cantidad de votos.
En beneficio del método D’Hondt podemos decir que un congreso muy fraccionado, en ocasiones, poco contribuye a producir una legislación de calidad, aunque si debates largos e intensos sobre variados temas.
