-Ramón Vargas
Un ejército de 16,958 delincuentes anda por estas calles de Dios y del Diablo con licencias para matar, robar, violar, traficar y practicar todos los delitos imaginables e inimaginables que existen… Y todo gracias a otros delincuentes que se habían establecido en instituciones (policía y procuraduría), llamada a combatir la delincuencia.
El problema es que los delincuentes se controlan ellos mismos… Si en la sociedad Dominicana no surge un amplio movimiento ciudadano para combatir el crimen, perderemos el País. No hay esperanza con una justicia que es un mercado y una policía reproductora de malhechores; igual una clase política permeada por individuos vinculados a lo peor del bajo mundo.
Para que tengamos una idea del auge de la delincuencia, esos 16,958 fichados que fueron borrados, no son los que roban celulares ni ladrones de pequeñas monta, estos que no tienen para pagar y que les borren fichas, son delincuentes de alto perfil que pueden costear altas sumas.
Resultaba inexplicable ver a ciertos personajes hablando en medios exhibiendo riquezas sin posibilidad de justificar; algunos con pasado delictivo en actitud de arrogancia y agresiva contra ciudadanos correctos. Abogados con discursos de moralidad y en la práctica defendiendo delincuentes sin ningún escrúpulo.
Hay que reconocer y ser justo, dijo Duarte, la independencia otorgada por el presidente, Luis Abinader, a la procuraduría encabezada por Mirian Germán y su equipo, para todo el proceso de seguimiento a los diferentes casos que han escandalizado a la sociedad Dominicana; sin embargo, todavía es insuficiente, más aún cuando vemos que varios personajes con muchas culpas del desastre que vivimos no sólo se pasean exhibiendo el dinero que se robaron del pueblo dominicano, sino que amenazan con volver a sus viejas fechorías.
El proceso de anticorrupción debe seguir y profundizarse y proveer a Mirian y su equipo de todos los recursos necesarios. La sociedad y todas las instituciones más sanas y combativas, debe integrarse a un proceso irreversible de saneamiento. Nuestro País no merece esta desgracia.
Ahora que estamos en la víspera de un proceso electoral donde muchos delincuentes nos amenazan con candidaturas que llenan de vergüenza la sociedad, debería alguien, con más informaciones y conocimiento técnico que yo, hacer un álbum de esos políticos indeseables que muchos partidos tienen.
Y pongo un ejemplo… ¿Cómo es posible que un sinvergüenza como Julio Romero sea postulado por un partido a un cargo electivo?, ¿Dónde están las organizaciones que defienden los derechos de las mujeres?, ¿Será que a ese residente, que no tiene categoría de ciudadano, se le seguirá permitiendo burlarse de la dignidad de la mujer dominicana?
Debe someterse un listado de corruptos y sinvergüenzas que hacen daños a la política y a la imagen del país. Es necesario que la procuraduría forme un equipo para reponer las fichas borradas y fichar a los defichadores…
