En las últimas semanas, la misteriosa ausencia de Kate Middleton, la Duquesa de Cambridge, ha desatado una oleada de especulaciones y teorías conspirativas en los medios y redes sociales. La falta de apariciones públicas de la figura real ha alimentado una variedad de suposiciones, desde problemas de salud hasta conflictos internos en la familia real británica. Algunos aficionados reales han planteado la posibilidad de un embarazo o complicaciones relacionadas con la salud, mientras que otros sugieren tensiones familiares amplificadas por el reciente traslado de la familia a Kensington Palace.
Sentada en un banco y con rostro sereno, Kate Middleton explicaba su enfermedad y cómo han sido estas últimas semanas para ella, su marido y sus hijos.
«En enero me sometí a una cirugía abdominal importante en Londres y en aquel momento se pensaba que mi condición no era cancerosa. La cirugía fue exitosa. Sin embargo, las pruebas después de la operación descubrieron que había cáncer. Por lo tanto, mi equipo médico me recomendó someterme a un tratamiento de quimioterapia preventiva y ahora estoy en las primeras etapas de ese tratamiento», describe.
James, el hermano pequeño de Kate Middleton, ha querido evidenciar su cariño tras conocerse que está batallando contra el cáncer.
«A lo largo de los años, hemos escalado muchas montañas juntos. Como familia, también escalaremos esta contigo», ha escrito James Middleton en Instagram, acompañado de una fotografía de ambos durante su infancia.
El palacio también ha revelado que el diagnóstico de cáncer de Kate fue el motivo por el que Guillermo no acudió al servicio religioso celebrado en el castillo de Windsor, en honor a Constantino de Grecia.
Tras meses de especulación, Kate Middleton ha roto su silencio para confirmar que tiene cáncer. En un vídeo que fue grabado el pasado miércoles por la BBC, la princesa de Gales se abre parar hablar de la enfermedad que le ha sido diagnosticada. Vestida con un sencillo jersey de rayas marineras y visiblemente más delgada, la heredera pide respeto por su familia, sobre todo por lo que se refiere a sus hijos.
Cuando el príncipe Guillermo, heredero al trono, canceló en el último momento su asistencia el pasado 27 de febrero a la misa en memoria de su padrino, el rey Constantino de Grecia, recibió grandes críticas. Se le acusó de no ser profesional e incluso de ser el culpable de avivar aún más las teorías de conspiración en torno a Kate Middleton.
La pareja, afincada en Estados Unidos, quiso enviar un mensaje privado dirigido a Kate Middleton y su marido, se desconoce si a través de teléfono, videollamada o mensaje escrito, y según fuentes consultadas por los medios británicos, se cree que tanto Harry como Meghan se enteraron de la triste noticia a la vez que el mundo entero.
Personas cercanas a Palacio han asegurado en ‘New York Post’ que los Sussex «no tenían ni idea» sobre la enfermedad de Kate. Además de ponerse en contacto personalmente y en privado con los padres de George, Charlotte y Louis, los Sussex emitieron un breve comunicado tras el anuncio de Kate Middleton y desearon a la princesa de Gales y a su familia «salud y curación» y que pudieran «hacerlo en privado y en paz».
Según el Palacio de Buckingham, el rey Carlos expresó su orgullo hacia Kate por su valiente discurso al anunciar que padece cáncer.
En el vídeo publicado por la Casa Real Británica, la princesa de Gales ha enviado un mensaje a todas aquellas personas que padecen de cáncer: «En este momento pienso también en todos aquellos cuyas vidas se han visto afectadas por el cáncer. Para todos los que enfrentan esta enfermedad, en cualquier forma, por favor, no perdáis la fe ni la esperanza. No estáis solos».
«Tener a Guillermo a mi lado también es una gran fuente de consuelo y tranquilidad, como lo es el amor, apoyo y amabilidad que muchos de vosotros habéis mostrado. Significa mucho para ambos. Esperamos que comprendáis que, como familia, ahora necesitamos algo de tiempo, espacio y privacidad mientras completo mi tratamiento.»
En enero me sometí a una cirugía abdominal importante en Londres y en aquel momento se pensaba que mi condición no era cancerosa. La cirugía fue exitosa. Sin embargo, las pruebas después de la operación descubrieron que había cáncer. Por lo tanto, mi equipo médico me recomendó someterme a un tratamiento de quimioterapia preventiva y ahora estoy en las primeras etapas de ese tratamiento».
«Quería aprovechar esta oportunidad para agradeceros personalmente todos los maravillosos mensajes de apoyo y por vuestra comprensión mientras me recupero de la cirugía. Han sido un par de meses increíblemente difíciles para toda nuestra familia, pero yo he tenido un fantástico equipo médico que me ha atendido estupendamente, por lo que estoy muy agradecida».
«Su rostro es muy serio, muy triste, aunque tiene un atisbo de sonrisa siempre que habla de la fuerza que tiene o da las gracias por los buenos deseos recibidos. Al final está abriendo su corazón y para ella es difícil, porque además tiene que recordar por todo lo que ha pasado. Hay una reflexión viendo el vídeo de Kate acerca de los políticos y también los miembros de las casas reales acerca de que hasta qué punto, en su caso, lo privado es público».
Cristian Salomoni, director del Instituto Internacional de Análisis de la Conducta y experto en comunicación no verbal, analiza el lenguaje corporal de Kate Middleton durante su vídeo: «En este vídeo está todo pensado. Empezando por la escenografía. Ese jardín verde, de primavera, que tiene la simbología de la vida, la vuelta a la vida después del invierno, que en el caso de Kate sería todo el proceso por el que ha pasado desde que la operaron en enero. El verde simboliza esperanza, un detalle muy valioso para una persona enferma de cáncer», explica el experto.
La Princesa de Gales afirmó que no fue fácil explicar que tiene cáncer a sus hijos y que ha sido una decisión que les ha tomado tiempo. «Nos ha tomado tiempo explicar todo a George, Charlotte y Louis de una manera apropiada para ellos, y asegurarles que voy a estar bien. Les digo que estoy bien, que me hago fuerte cada día».
Estas hacen referencias a operaciones que implican abrir el abdomen, lo cual puede deberse a causas muy diversas y requerir procedimientos específicos según cada caso.
Las más comunes incluyen la apendicectomía, mediante la que se extirpa el apéndice y que suele emplearse para acabar con la inflamación conocida como apendicitis; la cirugía de hernia inguinal, mediante la que se repara una hernia; o la laparotomía exploratoria, que sirve para explorar el interior del abdomen en busca de alguna fuente de sangrado o trauma que necesita ser reparada o eliminada.
