En el marco del Día Internacional de la Niña, Unicef urgió a reconocer y proteger los derechos de las niñas dominicanas, tras revelar que el 76 % de las adolescentes entre 15 y 17 años ha sido víctima de algún tipo de violencia antes de alcanzar la mayoría de edad.
Bajo el lema global “La niña que soy, el cambio que lidero”, la representante de Unicef en el país, Anyoli Sanabria, reafirmó el compromiso de la organización con la promoción del liderazgo femenino y la eliminación de la violencia y la desigualdad de género.
“Las niñas tienen derecho a crecer sin miedo, a estudiar sin violencia y a soñar sin límites. Escuchar su voz y acompañar su liderazgo es esencial para construir un futuro más justo y resiliente”, expresó Sanabria.
Violencia y desigualdad: una carga invisible sobre las niñas
Aunque las niñas dominicanas presentan mayores tasas de asistencia y finalización escolar que los niños, enfrentan múltiples barreras estructurales que limitan su desarrollo integral y su salud mental. Entre ellas figuran los embarazos adolescentes, las uniones tempranas, la sobrecarga de tareas domésticas no remuneradas y los altos niveles de violencia física, emocional y sexual.
El informe de UNICEF sobre el Estado de la Situación de los Derechos de la Infancia y la Adolescencia en República Dominicana señala que:
- El 76 % de las adolescentes de 15 a 17 años ha sido víctima de algún tipo de violencia.
- El 52.2 % reporta haber sufrido violencia sexual.
- En los espacios escolares, el 45.5 % ha experimentado agresiones físicas o psicológicas.
Estas cifras revelan una realidad alarmante y normalizada, donde la violencia afecta no solo el presente de las niñas, sino también sus oportunidades futuras y su bienestar emocional.
“Cada niña enfrenta una doble carga: la de sobrevivir a la violencia y la de demostrar constantemente su valor. Su integridad física y emocional, y su liderazgo, van de la mano”, agregó Sanabria.
Instó a las autoridades, comunidades y familias a garantizar entornos seguros, empáticos y participativos donde las niñas puedan expresarse libremente, tomar decisiones sobre sus vidas y ejercer liderazgo desde temprana edad.
Asimismo, la organización llamó a invertir en servicios de salud mental y en políticas públicas que combatan la violencia de género, asegurando igualdad de oportunidades para todas las niñas.
“Invertir en las niñas es apostar por un país más equitativo, resiliente y próspero. Ellas no solo son el futuro, también son el presente del cambio social que necesitamos”, concluyó Sanabria.
