El ex Superintendente de Electricidad, Juan Gómez, estimó que los buenos resultados que está dejando la generadora de Punta Catalina desdice la posición del economista José Luis Malkun, de que es necesario privatizarla para que funcione bien.
El técnico eléctrico recordó que el gerente de esa generadora informó que el pasado año dejó beneficios por más de 200 millones dólares, a pesar que el carbón se compró a un precio por encima del normal en el mercado.
El encargado de la secretaría de Energía del partido Fuerza del Pueblo, destacó que no hay una empresa del sector privado que esté dejando esos márgenes de beneficio, con todo y los altos precios de la principal materia prima que utiliza.
Dijo que la privatización sólo se justifica en un proyecto nuevo en que el Estado no tenga que hacer inversión, para que el sector privado lo emprenda con sus propias inversiones.
“Una empresa que funciona bien, y puede funcionar mejor, dentro de los parámetros de los precios tradicionales del carbón no hay razones para quitarse de ella”, explicó Gómez.
Sobre las EDES
Por el lado de las distribuidoras de electricidad, Gómez recordó que estuvieron administradas por el sector privado y que no hubo ningún cambio favorable en el servicio.
“Cuando él (Malkun) estuvo en el Banco Central, se recompraron dos de las distribuidoras, siendo uno de los hacedores de políticas públicas, entonces, por qué se recompraron Edesur y Edenorte?.
Luego, siendo del Estado, se contrataron administradores privados extranjeros para que las manejen y el resultado fue un fracaso”, observó
Gómez señaló que en las distribuidoras de electricidad lo que hace falta es un plan serio de recuperación de pérdidas, con buenos gerentes y técnicos y contratar en el extranjeros los que hagan falta, aunque –asegura- en el país hay sectores eficientes y capaces de manejarlas.
El dirigente político señaló que el pasado año el nivel de pérdidas de las distribuidoras fue record, que incluso el subsidio alcanzó RD$1,800 millones.
Juan Gómez expresó que en esas empresas es preciso reformular los planes de trabajo que se han trazado y hasta la capacidad de los gerentes, porque el deterioro progresivo que presentan son injustificables.
