Sostuvo que el fideicomiso de Punta Catalina puede prescindir del Fideicomitente Adherente, pero no es ilegal y no representa ningún peligro de privatización.
Jacqueline Morrobel
El gerente de la Fiduciaria Banreservas, Andrés van der Horst, dijo hoy que cuando se hace un acuerdo de fideicomitente adherente, lo primero que se pone en garantía es parte de los activos y se tiene que ir nuevamente al Congreso Nacional, lo que hace imposible que bajo la figura del fideicomitente adherente se pueda privatizar la termoeléctrica Punta Catalina, “eso lo dice la Constitución”
Explicó que se ha introducida la figura del fideicomitente adherente en el contrato del fideicomiso de Punta Catalina, pero no necesariamente para que se active, sino que es una posibilidad que tiene un ejercicio financiero de largo plazo, para que si en algún momento determinado se necesita capital, que no sea un préstamo o bonos “entonces se tiene esa posibilidad de buscar un fideicomitente adherente en vez de un préstamo.”.
Expresó que esta figura no es sinónimo de privatización y aseguró que en caso de que se necesite financiamiento de una entidad pública o privada, se requiere a la figura del fideicomitente adherente como parte del aporte que se hizo, no a través de acciones.
Hay una discusión sobre la base de un planteamiento erróneo, porque independientemente que se esté de acuerdo o no con la figura de fideicomitente adherente, que está dentro de otros fideicomisos que se encuentran en el Congreso Nacional, como es el de Ciudad Juan Bosch, esa posibilidad es de alguien que puede aportar al fideicomiso sin ningún tipo de beneficio al final.
“Porque el fideicomisario, en este caso de Punta Catalina, es el Ministerio de Hacienda, es el dueño del bien, por lo tanto, el Estado dominicano si decide utilizar la figura de fideicomitente adherente, que está ahí como parte de una posibilidad, puede incluso eliminarlo sin ningún problema”, indicó..
El patrimonio sigue siendo del Estado
Manifestó que con el Fideicomiso lo que se hace es aislar el patrimonio, pero sigue siendo del Estado, la administración en este caso de Punta Catalina, es del Banco de Reservas y expresa claramente que cuando se va a enajenar ese bien, se tiene que ir al Congreso Nacional.
Sostuvo que a pesar de que está la figura del fideicomitente adherente en el contrato del fideicomiso de Punta Catalina, lo que está es la definición, no está la posibilidad de enajenar, contrario al fideicomiso privado, que sí se puede enajenar por un marco legal general.
Indicó que la figura de fideicomitente adherente se utiliza en otros fideicomisos y aseguró que no fue colocado por la Fiduciaria Banreservas, sino por el fideicomitente que es el que ordena y en este caso es el Estado.
“Qué puede pasar entonces, que mañana el Estado dominicano decida buscar una participación fiduciaria, en vez de un préstamo, a través de una participación del Ministerio de Hacienda, del Banco Central, de Egehid o del sector privado”, sostuvo.
En el contexto del sector privado en un fideicomiso, Andrés van der Horst detalló entrevistado en el programa La Hora 22, que se transmite por Teleradioamérica, que en ningún caso el área privada puede exigir participación de los activos, pero sí puede requerir que haya rendimiento sobre su inversión.
Asimismo, puso como ejemplo, que en caso de que se quiera buscar una inversión adicional, se debe hacer a través de una delegación del comité técnico y para ser parte de los activos, debe ir al Congreso Nacional.
Destacó que si en esa supuesta inversión adicional, que en este ejemplo sería de un inversionista privado con 100 millones de dólares y lo que quiere es una participación en base un de rendimiento, se debe poner en el contrato del fideicomitente adherente y no se afecta ni se enajena.
“Ya que para enajenar tiene que afectar el fideicomitente (Ministerio de Energía y Minas) y el fideicomitente fideicomisario (Ministerio de Hacienda) y para compartir los beneficios tiene que enajenar e ir al Congreso, pero antes debe disolver ese contrato, tiene que cambiar el fideicomisario, que en ningún caso se puede cambiar”, manifestó.
Reiteró que por eso es que siempre dice que es imposible privatizar el contrato de fideicomiso de Punta Catalina, el cual está en el Senado de la República.
El gerente de Fiduciaria Banreservas puntualizó que el fideicomitente adherente no es sinónimo de privatización y aseguró que en caso de que se necesite financiamiento de una entidad pública o privada se requiere a la figura del fideicomitente adherente como parte del aporte que se hizo, no acciones.
Recordó que Punta Catalina costó 2,500 millones de dólares y la misma tiene que dejar un beneficio sobre la base de un costo del carbón y un costo de compra de energía.
Intereses político y económico ocasionan animadversión de PC
En su exposición sobre la mala percepción del fideicomiso de Punta Catalina, el gerente de la Fiduciaria Banreservas, dijo que esa termoeléctrica genera el 30% de la producción de energía y tiene una capacidad de autofinanciamiento de seguir creciendo.
Destacó que eso ocasiona animadversión y muchas conjeturas e intereses políticos y económicos y el fideicomiso es una figura muy nueva.
La República Dominicana, luego de la Ley 189-11, ha tenido el crecimiento en términos inmobiliarios más grande de toda su historia. Más de 200 mil familias se han beneficiado del fideicomiso inmobiliario.
Sostuvo que el fideicomiso de Punta Catalina desde el punto de vista técnico y financiero puede prescindir del Fideicomitente Adherente, pero no es ilegal y no representa ningún peligro de privatización. Dijo que en ningún fideicomiso público de los que hay hasta ahora, ha habido ningún escándalo de corrupción.
El gerente de Fiduciaria Banreservas expresó que el presidente Luis Abinader ha demostrado en su gestión, que es una persona sumamente reflexiva, pero indicó que hay que separar una cosa de la otra, cuando lo que se quiere es hacer daño desde el punto de vista político.
Destacó que el contrato de fideicomiso de Punta Catalina desde el punto de vista técnico y financiero puede prescindir de la figura del fideicomitente adherente, sin ningún problema, pero reiteró que esa figura no es ilegal y no representan ningún tipo de privatización y ningún tipo de enajenación.
“Que crea suspicacia, intranquilidad, perfecto, se puede prescindir de la figura del fideicomitente adherente, pero nadie puede decir que se va a privatizar, ni que nombrar a Celso Marranzini va a representar que se va privatizar, porque eso es prejuicio”, dijo.
PC está regularizada por Compras y Contrataciones
En otro tema, Van der Horst negó que bajo el régimen de ley de Compras y Contrataciones el comité técnico de Punta Catalina no está regularizado. Explicó que el acuerdo que se conoce en el Senado de la termoeléctrica Punta Catalina, específica que se va a reglamentar el tema de las compras a través de la Ley 340.
“La ley 340 le confiere a Compras y Contrataciones y al presidente Luis Abinader reglamentar lo que se llama regímenes especiales y en el caso de Punta Catalina se ameritan temas más expeditos que tienen que ver con áreas relativas a ella, porque en este caso es una planta eléctrica, no un ministerio”, sostuvo.
Dijo que anteriormente se hacía una compra mediante un proceso de excepcionalidad en Punta Catalina y ahora se hará lo normal, como se maneja una empresa con transparencia.
